La Policía Local de Utrera pone en marcha una campaña de … – Utrera Digital

La Policía Local de Utrera tiene estos días en marcha una campaña especial de vigilancia y control de cocheros de caballos en la que está realizando pruebas de alcoholemia en el recinto ferial y sus alrededores. Se enmarca en el ciclo de campañas impulsadas por el Ayuntamiento durante el año, ya que los conductores de los coches de caballos están sujetos a las mismas normas que el resto de conductores de vehículos a motor.
Durante la Feria de Consolación, el número de carruajes se multiplica por el recinto ferial y por las calles de la ciudad. Por ello «se hace necesario realizar controles aleatorios sobre los mismos con el fin de evitar incidentes», según han señalado desde la Policía Local. En este sentido, los agentes los identifican como a cualquier otro vehículo, por lo que si transitan por alguno de los dispositivos de control de acceso establecidos en el recinto ferial o alrededores se realizan las pruebas de alcoholemia, tienen las mismas obligaciones que cualquier otro conductor a someterse a dichas pruebas.
La Policía Local de Utrera lleva a cabo estos controles de alcoholemia a los jinetes y conductores de coches de caballo de forma preventiva, ya que las maniobras que estos realizan en el recinto ferial pueden poner en peligro la seguridad del resto de peatones y usuarios de las vías. Por ese motivo, consideran necesario asegurar que dichas personas están en condiciones de controlar en todo momento a los animales y vehículos.
El alcohol está presente entre el 30% y el 50% de los accidentes mortales, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), por lo que es uno de los factores de riesgo que está con más frecuencia implicado en los accidentes de tráfico. Teniendo en cuenta que la ley se aplica igualmente para los responsables de los coches de caballos, estos no pueden superar la tasa de alcohol permitida o, de lo contrario, se enfrentan a sanciones recogidas en el reglamento general de circulación. Dar positivo en un control de alcoholemia supone una infracción que puede ser sancionado con las siguientes multas:
- Cuando la tasa de alcohol en aire espirado se sitúa entre 0,25 mg/l y 0,50 mg/l, la multa es de 500 euros, aunque si el conductor es reincidente, la multa será de 1.000 euros, procediéndose a la inmovilización del vehículo.
- Si la tasa de alcohol en aire espirado supera los 0,50 mg/l, la sanción es de 1.000 euros, procediéndose a la inmovilización del vehículo.
- Del mismo modo, también se considera una infracción muy grave, el negarse a someterse a un control de alcoholemia. La sanción es de 1.000 euros e inmovilización del vehículo.